El espacio soberano de un teatro, íntima oscuridad entre las butacas y también en el escenario, silencio, no hay cámaras ni teléfonos; se enciende un único foco, el protagonista ‘se desnuda’ y comienza a hablar en susurros y narra una sola historia y una sola vez; se le nota en la voz que es parte implicada. Lo cuento como espectadora de ‘Diario Vivo‘, pero las versiones de este novedoso espectáculo son tantas como personas hay en la sala contemplándolo. François Musseau es el autor, un periodista dispuesto a ensalzar su profesión, a tratarla con la ilusión que merece.
Así decidió Musseau subir el periodismo a los escenarios más respetables, hacer casting a las historias que se amontonan con el ejercicio de la profesión, invitar a los periodistas a sacarlas fuera y crear con ellas un espectáculo a base de sentimientos, de emociones y valores. Sin otra distracción, el poder de la Palabra recorre rauda el patio de butacas y los palcos. Es un ‘Diario Vivo‘. El público se entera de cómo trabaja un periodista, de cómo da forma un ser humano a eso que llamamos periodismo, a ese afán por contar lo que sucede, para que todo se sepa.
A François Musseau se le ocurrió esto hace pocos años. Cuenta que es “un formato de periodismo en el escenario muy similar al ‘Pop-Up Magazine‘ estadounidense o al ‘Live Magazine’ francés”. Lo presentó en Madrid, donde vive, en una sala de Lavapiés y lo estrenó en 2017 en el Palacio de la Prensa. El 5 de junio de 2018 consiguió llenar las setecientas butacas del madrileño Teatro Cofidís Alcázar.
Para la posteridad no queda nada (nada se graba ni se repite), salvo lo mucho que se agita en nuestro interior durante y mucho después del espectáculo. Las historias salen con nosotros de ese entorno íntimo ideado por Musseau, pero ya con nuestro filtro incorporado. Quienes no estuvieron para escucharlas en directo, sólo pueden oír o leer nuestro relato. O venir a las Jornadas D+i a oírselo contar al propio Musseau, quien, parece ser, traerá en su bolsillo una perla de ‘Diario Vivo‘.
Mejor dicho, serán dos perlas. Una la contamos ya, porque requiere preparativos. A propuesta de D+i, el equipo de este singular proyecto se está planteando embarcarse en un futuro ‘Diario Vivo’ de periodismo científico y divulgación. François Musseau lo contará en las jornadas y tendrá ocasión de comprobar las mil y una historias que laten detrás, dentro y alrededor de la ciencia. Seguro que muchos divulgadores están ya deseando compartir las suyas, cara a cara con el público desde un escenario. Ojalá hagamos realidad un Diario Vivo de la Ciencia.
