Qué es eso de pensar críticamente? Se llega a ello, dicen las voces expertas, mediante la reflexión, el rechazo de los mitos y el apego a las pruebas y a la toma de decisiones bien informada; también a través de un aprendizaje por indagación. Nos lo cuentan en D+i 2022 Rut Jiménez-Liso, de la Universidad de Almería, Susana Bayarri, del Instituto Agroalimentario de Aragón, Antonia Manassero, de la Universitat de les Illes Balears, y Ángela Monasor, de la Fundación Española para la Ciencia y la Tecnología (Fecyt).
Uno de los retos sociales hoy más importantes es el fomento del pensamiento crítico y, parece lo más ‘rentable’, empezar por los cimientos, por la infancia. Rut Jiménez-Liso, profesora de didáctica de las ciencias en la Universidad de Almería y una de las coordinadoras del manual para docentes ‘Enseñando ciencia con ciencia’, nos hablará de lo fiable de las pruebas y del aprendizaje por indagación.
Viene con tres mensajes: “Que hay mucha investigación sobre lo que funciona y no funciona; que es muy importante mejorar la enseñanza de las ciencias para hacer ciudadanos críticos capaces de tomar decisiones fundamentadas; y que todos y todas podemos aprender ciencias, que el mundo que nos rodea puede tener sentido”. Jiménez-Liso ha asumido una tarea: poner en manos de docentes los resultados de la investigación en didáctica de las ciencias experimentales. La conexión entre ambos campos, investigación y docencia, es para ella “sumamente satisfactoria”, porque acaba con los mitos en educación y todo funciona.
Susana Bayarri se ha enfrentado a otro desafío: fomentar el pensamiento crítico entre personas con discapacidad intelectual o con enfermedad mental, para que sean capaces de decidir qué alimentos incluyen en su cesta de la compra, basándose en la información del etiquetado, y de cocinarlos siguiendo prácticas correctas de higiene. Es el proyecto ‘Campeones de la alimentación’, que busca promover la “autonomía” de estas personas y “optimizar sus capacidades -explica Bayarri- hacia una vida independiente”. Es divulgación inclusiva.
Antònia Manassero prefiere que la infancia aprenda a pensar con juegos serios cooperativos. Su proyecto consiste en enseñar “alfabetización científica” a estudiantes de primaria, a través de “juegos que ofrecen una analogía de la práctica científica validadora de conocimientos, para desarrollar destrezas de pensamiento crítico”. Se trata de razonar, discutir, convencer, colaborar… para ganar el juego. Hay cuatro tipos: rompecabezas, dados, cajas negras y juegos de naipes. Y gana quien adquiera más habilidades de pensamiento crítico. El proyecto no olvida ni a docentes ni a las familias ni a los centros escolares; dispone de material didáctico para todos ellos.
‘Cazadores de mitos’ es otra iniciativa, en este caso de Fecyt, cuyo objetivo es “formar a estudiantes de educación secundaria en el proceso de generación de pensamiento científico, para mejorar su capacidad de pensar críticamente”. Nos lo presenta Ángela Monasor: “El proyecto consta de dos acciones, primero una intervención educativa, basada en investigaciones realizadas por el Laboratorio de psicología experimental de la Universidad de Deusto, y, segunda acción, propuesta de retos en los que el alumnado plantea una investigación siguiendo el método científico para demostrar la falsedad de mitos comunes, para que las y los adolescentes aprendan a protegerse de sus propios sesgos”.
Fecyt ha ensayado ‘Cazadores de mitos’ con 1.660 estudiantes de 2º a 4º de la ESO, en cuarenta centros educativos de Andalucía, Castilla La Mancha, Castilla y León y Comunidad de Madrid. Y los resultados recogidos sugieren que la intervención fue eficaz en el desarrollo del pensamiento crítico. Actualmente hace un seguimiento de un pequeño grupo de diez centros, “para evaluar -señala Monasor- si los efectos de la intervención se mantienen a largo plazo en el alumnado que la ha realizado”.
‘Campeones de la alimentación’ y ‘Cazadores de mitos’ se llevarán, además, a la práctica en la parte del programa de D+i abierta al público de la ciudad, Ciencia In Vivo. Sus autoras vienen a contarlo y también a probarlo. Con ‘Cazadores de mitos’ estará también Naroa Martínez, del Laboratorio de psicología experimental de la Universidad de Deusto.